Es una gran herramienta de decoración para el medio ambiente. Retiene

casi un 60% de humedad. Protege las raíces de las fluctuaciones estacionales de la temperatura, manteniendo una temperatura más alta en invierno y más bajas en verano. Sanciona el crecimiento de malezas pues no deja pasar a la luz. Protege el suelo de la erosión, previene de la lluvia y el viento quitándoles las partículas. Permite que las raíces respiren más fácilmente, al tiempo que conserva el suelo friable.

USO: En primer lugar, erradicar cuidadosamente las malezas en plantas y rastrillar el suelo liso. Cubra el suelo con mulch, unos 2–5 cm de espesor. 

TIEMPO DE USO: Durante todo el año.

COLORES: Marrón, rojo ladrillo.